Bitácora Dobleaeseuve

        De entrada: Es muy probable que todo lo que diga del libro esté mal interpretado. Podré ser un tipo soberbio, creído e intelectualoide, pero sé claramente que no puedo adjudicarme entender a Hegel, o siquiera a las y los intérpretes del mismo. Desde ahí, comparto mi experiencia con el libro en cuestión.      Parto con las sensaciones.      Y estas son positivas. El autor es sumamente pedagógico, metódico, de capítulos cortos y al grano. Intenta todo el rato aplicar en la "realidad" la densa y oscura teoría hegeliana. Lanza bromas, hace sus descargos contra la academia, contra los que leen mala a Hegel, contra las ciencias sociales, contra el mundo si es necesario. Mantiene el libro en un tono siempre fresco. Punto aparte el final del libro, con un tono cercano, en primera persona, transparentando sus intenciones y apreciaciones. Y eso a la larga se agradece mucho. Es poco probable que (yo al menos) retenga las partes técnica...